martes, febrero 11, 2014

Que nadie quede sin nombrar.



Que nadie quede sin nombrar





Todos tenemos un nombre

el que nos

ponen nuestros

padres

un nombre por el que nos llaman

un nombre por el que atendemos

los hermanos africanos

dejan su nombre

junto a sus padres

sus hermanos

sus amigos

sus amores

dejan su nombre

y

ya no lo recuperarán

ni siquiera

con la muerte

verde y de charol

en la playa de Tarajal

sólo


que algunos se

llamaban

Larios,

Blasie.

Armand

o

Yves

que con esa extraña sensación

entre desesperados

e

ilusionados

querían una vida.

Les hemos regalado

una muerte

la más indigna

de las muertes

la muerte

de los inocentes

mientras

muchos

miran

para otro lado

se ponen de lado

algunos incluso
con desprecio.





1 comentario:

Uno que ya está hasta los cojones dijo...

Poesia revólver contra fusiles de botes de humo y pelotas de goma manejados por tarados ¿fascistas?, disparando contra la capacidad de flotación de los desesperados por el hambre, disparando a las órdenes de verdaderos hijos de p..., protegidos por otros idem en las instancias superiores y en el ministerio del desorden interior que procuraban ocultar su propio crimen